Así que al dia siguiente tuve que retroceder un poco en la búsqueda de la localidad de Balboa, en donde nos encotramos por primera vez con pallozas; aunque en este caso la sensación que ofrecen es un tanto artificial (volverán a aparecer en este blog más adelante).
En las cercanías de Balboa se encuentran los restos de su castillo medieval.
Poco después de tomada esta foto abandonábamos León para entrar en los Ancares Lucenses.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja aquí tu comentario