lunes, 23 de mayo de 2011

Santuario de As Ermidas

Desde A Veiga volvemos hacia el oeste y hacia las cercanías del río Bibei, que en esta zona forma un profundo cañón en forma de V. Tal vel el punto más emblemático sea el santuario de As Ermidas o "Las Ermitas", que se sitúa en el fondo del valle.


La construcción, tanto al interior como al exterior, es plenamente barroca.


 La leyenda nos dice que alrededor del siglo VII se asentaron en el lugar  siete ermitaños en siete cuevas. Tras la invasión musulmana, la accidentada vertiente derecha del rí­o Bibei se convertirí­a en un lugar cubierto de matorrales siendo allí­ donde unos pastores alentados por los extraños bramidos que hací­a el ganado al pasar por un lugar determinado, encontraron en una cueva la imagen de Marí­a con el Niño en brazos. La noticia corre pronto por el contorno y rápidamente es invocada para conseguir favores del Altí­simo. De este entusiasmo fervoroso surgió la necesidad de construirle una capilla en el lugar del hallazgo, esto acaecí­a hacia finales de la edad media y en ella estarí­a la imagen de manera pasajera, pues, los pueblos cercanos querí­an tener en posesión dicha imagen, por eso con frecuencia era trasladada de un pueblo a otro.

En el año 1.624 el Obispo de Astorga, D. Alonso Mexí­a de Tovar, en visita pastoral por aquellas tierras llegó a San Miguel de Vidueira, donde sufrió una repentina dolencia, que puso su vida en trance desesperado, creyó que estaba en los últimos momentos de su vida, invocó a Nuestra Señora das Ermitas. Tuvo una visión de la Madre de Dios, quien le impuso la mano sobre la frente y en el instante se sintió plenamente curado. Cuando llegó a As Ermidas reconoció que era aquella figura de Nuestra Señora la que se le habí­a aparecido. El Obispo agradecido mandó construir en honor de la Madre de Dios una amplia iglesia a la que se le unirí­a, según sus planes, una casa para el administrador y los mantenedores del culto, residencia para los prelados que fuesen en visita y un mesón para peregrinos y devotos. No llegó D. Alonso a ver concluido su proyecto, lo que hizo fue la nave central del templo actual.

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